Una maravilla aérea digna de museo. En el partido de vuelta de los cuartos de final de la CONMEBOL Sudamericana, Fluminense recibió a Lanús en el Estadio Maracaná y vivió un momento de puro éxtasis deportivo. A los 27 minutos, Agustín Canobbio voló ante la defensa rival para conectar un centro y convertir con una espectacular chilena que remató al palo opuesto, sentenciando el 1-0 que igualaba la serie.

La jugada nació en la banda izquierda con el colombiano Serna, quien desbordó y levantó un centro bombeado. Lucho Acosta lo peinó con la cabeza para dejar de frente al uruguayo, que improvisó una tijera perfecta dentro del área chica para sorprender a todos y mandar el balón a la escuadra. Fue el segundo tanto del extremo de 26 años en el torneo, donde además ya había repartido una asistencia.

Fluminense, obligado a ganar en casa

El tanto de Canobbio tenía un peso adicional: igualaba la eliminatoria (1-1), ya que en la ida el Granate había ganado por la mínima con gol de Marcelino Moreno. Ahora, el escenario es claro: si el resultado global termina en empate, el pase a semifinales se definirá directamente desde el punto de penal.

Los dirigidos por Renato Gaúcho llegaban con la presión de revertir la serie, respaldados por su invicto de doce partidos en la Sudamericana (diez victorias y dos empates). Sin embargo, en el Brasileirao su presente no es tan sólido, con dos derrotas, un empate y dos triunfos en sus últimos cinco encuentros, lo que lo ubica en la octava plaza, muy lejos del líder Flamengo.

Además, el equipo carioca sufrió bajas importantes: Ganso se quedó fuera por una lesión en la pantorrilla y Nonato es duda por molestias en el pie derecho, por lo que Lucho Acosta apunta a tener mayor protagonismo.

Lanús llega con ventaja y plan de resistencia

En la otra orilla, Lanús afrontó el duelo con la tranquilidad de tener ventaja y el buen presente que arrastra en la liga argentina, donde se mantiene cuarto en su grupo con 13 puntos. El conjunto de Mauricio Pellegrino debía repetir prácticamente la misma alineación del partido de ida, ya que hombres como Felipe Peña Biafore, Ramiro Carrera, Raúl Loaiza o Ronaldo Dejesús siguen descartados por lesión.

El Granate apostó a resistir en el Maracaná y administrar el tiempo, consciente de que con mantener la igualdad global podía empujar la serie a los penales. Pero la chilena de Canobbio agitó todo y transformó el partido en un duelo de nervios que hizo temblar Río de Janeiro.