La clasificación histórica de Noruega al Mundial 2026 dejó mucho más que fútbol. El contundente 1-4 en Roma certificó el boleto de la generación liderada por Erling Haaland, autor de un nuevo doblete, pero también destapó una escena surrealista que rápidamente se volvió viral: el pique inesperado entre el delantero del Manchester City y el defensa italiano Gianluca Mancini.

El partido venía cargado de tensión. Italia, obligada a ganar después de haber caído 3-0 en Oslo, se jugaba la vida por evitar otro repechaje; Noruega buscaba consumar su primer Mundial en 28 años. Y en medio de ese ambiente, Mancini y Haaland protagonizaron un encontronazo tan extraño como explosivo.

“¿Qué estás haciendo?”: la reacción de Haaland que lo cambió todo

Tras el partido, Haaland no se guardó nada en declaraciones a TV 2.
El noruego explicó que el origen de la disputa fue… inesperado.

“Empezó a tocarme el c... y pensé: ‘¿Qué estás haciendo?’”, reveló con una mezcla de sorpresa y molestia.

Según el delantero, la situación lo sacó completamente de ritmo durante un instante, pero terminó convirtiéndose en gasolina pura para incendiar su rendimiento en la segunda mitad.

“Empecé a entusiasmarme un poco y dije: ‘Muchas gracias por la motivación’. Vamos a por todas.”

Y vaya si lo hizo: Haaland marcó dos goles, dio la vuelta al partido y silenció Roma con una sonrisa irónica dirigida precisamente al defensor italiano.

“Luego marqué dos goles y ganamos 1-4, así que genial. Muchas gracias a él”, remató.

Haaland, cifras de otro planeta

El doblete no solo selló el pase de Noruega. También permitió que Haaland igualara los 55 goles de Kylian Mbappé… pero con 46 partidos menos con su selección. Una diferencia brutal que confirma lo que ya parece evidente: estamos ante uno de los goleadores más devastadores de esta era.

Con su primera Copa del Mundo asegurada, Haaland tendrá por fin el escenario global que su talento reclama desde hace años.

Italia, hundida: repechaje y dudas crecientes

La derrota en Roma completó una pesadilla para la Azzurra, que ya había caído 3-0 en Oslo y ahora deberá jugar nuevamente el repechaje.
Después de perderse los Mundiales de 2018 y 2022, la caída ante Noruega reabrió heridas profundas y encendió alarmas en todo el país.