El paso de Henrikh Mkhitaryan por el Manchester United estuvo lejos de ser un cuento de hadas. El mediocampista armenio, hoy figura del Inter de Milán, ha revelado en su nuevo libro los tensos episodios que vivió bajo la dirección de José Mourinho, quien no solo lo apartó del equipo, sino que llegó a pedirle por mensaje que abandonara el club.

Mensajes, tensiones y una ruptura inevitable

Mkhitaryan llegó al Manchester United en 2016 procedente del Borussia Dortmund, tras un brillante paso por la Bundesliga. Su fichaje, valorado en 27 millones de libras, despertó grandes expectativas entre los aficionados de Old Trafford. Sin embargo, su etapa en Inglaterra se tornó tormentosa bajo el mando de Mourinho, con quien la relación se deterioró rápidamente.

En el libro, el jugador relata cómo el técnico portugués lo presionó para que se marchara. “Durante los entrenamientos no me dirigía la palabra, guardaba un silencio absoluto. Pero por las noches me enviaba mensajes de WhatsApp: ‘Miki, vete, por favor’”, cuenta el armenio. “Le respondía siempre lo mismo: me iré si encuentro el club adecuado. Pero hacia enero, el mensaje cambió: ‘Miki, por favor vete, así puedo fichar a Alexis Sánchez’”.

La tensión llegó a su punto máximo cuando ambos discutieron cara a cara. “Me dijo que era una basura y perdí los estribos. Le respondí: ‘Tú eres la basura, y una muy grande’. Me gritó que me fuera y que no quería volver a verme”, recordó. Poco después, Mkhitaryan abandonó el club en un intercambio con Arsenal, que llevó a Alexis Sánchez a Old Trafford.

El reencuentro de Mourinho con Portugal

Mientras el libro de Mkhitaryan reabre viejas heridas, José Mourinho vive un nuevo capítulo en su carrera. Ahora dirige al Benfica, club con el que ha regresado a la ciudad donde comenzó su leyenda. Este domingo, su equipo empató 0-0 frente al Oporto en el clásico de la Liga portuguesa, rompiendo la racha perfecta de los dragones y dejando al Benfica en la tercera posición con 18 puntos.

A pesar de su fama de estratega implacable, los testimonios de jugadores como Mkhitaryan vuelven a poner sobre la mesa el estilo duro y la exigencia extrema del técnico portugués. Para algunos, ese método forja campeones; para otros, deja cicatrices difíciles de borrar.

Lo cierto es que el “Special One” sigue generando titulares —ya sea desde el banquillo o desde las páginas de un libro—, recordando que su figura, para bien o para mal, sigue siendo una de las más polémicas del fútbol mundial.