Una hazaña de resistencia y corazón

Carlos Alcaraz logró su quinto título de Grand Slam luego de vencer en cinco sets a Jannik Sinner con parciales de 4-6, 6-7(4), 6-4, 7-6(3) y 7-6(2), en un duelo que duró 5 horas y 29 minutos, la final más extensa en la historia del torneo parisino. El español, de 22 años, se convirtió en el primer jugador nacido en el siglo XXI en alcanzar los 20 títulos profesionales y en el tercero más joven en conquistar cinco grandes, solo detrás de Bjorn Borg y Rafael Nadal.

Nunca antes Alcaraz había remontado un partido tras perder los primeros dos sets. Su resistencia física y mental fue clave para revertir un encuentro que parecía perdido ante un Sinner que llegó sin ceder un solo set en el torneo. El italiano tuvo tres bolas de partido, pero el español no se rindió y forzó el desenlace más emocionante que se recuerda en Roland Garros.

Sinner cae ante su rival más desafiante

Jannik Sinner, que venía con una racha de 20 victorias consecutivas en torneos de Grand Slam, sufrió su primera derrota en una final de esta categoría. El italiano, que ya había sido vencido por Alcaraz en semifinales del año pasado, volvió a tropezar ante un rival que parece tenerle tomada la medida.

En el cuarto set, Sinner llegó a estar 0-40 con servicio del español y tres oportunidades para coronarse, pero el murciano levantó cada una de ellas con autoridad y remontó para llevar el partido al set definitivo. Fue ahí donde Alcaraz se mostró imparable, con un tenis que rozó la perfección y que lo condujo a una de las victorias más memorables de su carrera.

Desde la tribuna, figuras como Spike Lee y Dustin Hoffman celebraban con emoción el nuevo logro del español, quien sigue construyendo una trayectoria que ya apunta a ser legendaria. Con esta victoria, Alcaraz reafirma su dominio en tierra batida y se consagra como el heredero natural de Rafael Nadal en Roland Garros.

El campeón no ha perdido una final de Grand Slam en su carrera: cinco de cinco. Y esta, sin duda, fue la más espectacular.