El Manchester City recortó distancias en la Premier League tras su victoria en un partido frenético ante el Fulham, y Pep Guardiola aprovechó el momento para enviar un nuevo mensaje al Arsenal, líder provisional del torneo. Con la brecha reducida a dos puntos, el técnico español recordó que su equipo sabe competir cuando persigue y que el campeonato es una carrera de resistencia, no de velocidad.

“La Premier es muy larga”: el mensaje de Pep al Arsenal

Tras el 4-5 en Craven Cottage, Guardiola insistió en que su equipo está más que acostumbrado a remar desde atrás. “El Arsenal es sólido, es fuerte, pero sé exactamente lo que tenemos que hacer. Si fallamos, será muy difícil, pero la Premier es larguísima”, señaló.

Guardiola, consciente del ruido alrededor de la tabla, recordó la experiencia acumulada del club.
“Hemos ganado seis Premier Leagues, cuatro o cinco de ellas estando por detrás en diciembre o enero. El campeón es el que crece con el paso de los meses.”

El técnico también destacó el nivel del Chelsea de Enzo Maresca, pero insistió en que la clave está en mantener la calma, gestionar emociones y evitar lesiones en una temporada que aprieta sin descanso.

Un centro del campo al límite por las lesiones

Mientras presiona al Arsenal desde las declaraciones, Guardiola enfrenta un problema mayor puertas adentro: el mediocampo del City está al borde del colapso. 

Con Rodri fuera las últimas semanas y Mateo Kovacic sin fecha cercana de regreso, el técnico se quedó solo con Nico González como mediocentro disponible. Y cuando retiró al español en el minuto 64 para dosificarlo, el equipo se tambaleó.

El Fulham anotó dos goles en quince minutos y rozó el empate, que no llegó únicamente gracias a un salvataje en la línea del defensor Josko Gvardiol. “Tenemos un problema”, admitió Guardiola sin rodeos.
“Tenemos tres mediocentros, pero dos han estado lesionados mucho tiempo. Rodri volverá pronto, pero Kovacic aún tardará.”

Ante este escenario, Pep ya prueba alternativas: O’Reilly como mediocentro, Ait-Nouri o Aké como laterales híbridos, o incluso Reijnders, aunque lo considera más ofensivo. Es un rompecabezas inesperado justo antes de un tramo decisivo.

Un calendario que no perdona

El City recibirá al Sunderland este fin de semana y posteriormente viajará al Santiago Bernabéu para enfrentarse al Real Madrid en la Champions League. Lo que ocurra en estos días puede marcar el pulso inmediato de la temporada.

Guardiola lo sabe y, aun con bajas, mantiene la presión alta sobre el Arsenal. El mensaje quedó claro: el City no piensa soltar la carrera por el título. Y si algo ha demostrado la era Guardiola es que, cuando el conjunto celeste aprieta, el margen de error de sus rivales se reduce a cero.