La frase de Russo sobre su salud y Boca antes de morir
En uno de los momentos más difíciles de Boca Juniors, Miguel Ángel Russo dejó una frase sobre su salud que hoy, tras su fallecimiento, resuena con un enorme peso emocional.
Un club en crisis y un técnico bajo presión
En agosto de 2025, Boca Juniors atravesaba una de las peores rachas de su historia. El equipo acumulaba 11 partidos sin ganar —siete de ellos en el ciclo actual—, había quedado eliminado en la fase preliminar de la Copa Libertadores, en cuartos del Torneo Apertura y en 16avos de la Copa Argentina. Además, marchaba penúltimo en el Torneo Clausura, con un clásico clave ante Racing en el horizonte.
En medio de esta tormenta, Miguel Ángel Russo decidió dar la cara públicamente desde el predio de Boca. Tocó todos los temas: su continuidad, conflictos internos, lesiones y, sobre todo, su estado de salud.
Cuando se le preguntó por este último punto, respondió con firmeza:
“No busquen cosas donde no las hay. Yo estoy bien. No me gusta perder, me duele, pero hay que levantar. El Consejo, todos, estamos buscando que gane Boca, que es lo que más nos gusta”.
Esa frase, pronunciada con calma pero con determinación, fue una de las últimas veces que Russo habló públicamente sobre sí mismo. Hoy, adquiere un valor especial.
Una despedida involuntaria
En aquella misma conferencia, Russo fue tajante al hablar de su futuro:
“Nosotros estamos bien, trabajando mucho. Para nosotros es importante ganar. Sabemos que vamos a enfrentar a un rival difícil. En ningún momento voy a pensar en algo negativo”.
Su mensaje fue el de un hombre que no estaba dispuesto a rendirse ni a abandonar el barco en medio de la crisis. También defendió a sus jugadores y habló de figuras clave como Leandro Paredes, a quien definió como “indiscutible”, y Edinson Cavani, de quien dijo que “en algún momento, cuando tenga continuidad, encontrará su nivel”.
Incluso abordó temas espinosos como la situación de Marcos Rojo, Marcelo Saracchi y Cristian Lema, jugadores apartados del plantel, y la reaparición de Frank Fabra como titular.
Un legado más allá de los resultados
Más allá de los malos números, Miguel Ángel Russo dejó un testimonio que hoy suena a despedida. Su frase sobre su salud no solo fue una aclaración; fue la muestra de un hombre que priorizó al club por encima de sí mismo, que desvió el foco de atención para proteger a Boca Juniors.
Russo falleció semanas después, pero esa conferencia quedó grabada como una de sus últimas apariciones públicas. Un momento en el que, sin saberlo, dejó una huella imborrable en la memoria de los hinchas.