La gran cifra que ganarían los árbitros ingleses
El arbitraje en la Premier League no solo representa un desafío dentro del campo, sino que también ofrece una retribución económica considerable. Según el diario británico The Times, los árbitros más experimentados pueden alcanzar un salario anual de 250.000 libras (300.000 euros), convirtiéndose en algunos de los mejor pagados del fútbol mundial.
Un sueldo acorde a la experiencia
Los ingresos de los colegiados en Inglaterra dependen en gran medida de su trayectoria y nivel de experiencia. De acuerdo con la información publicada, el salario medio de un árbitro en la liga inglesa oscila entre 170.000 y 180.000 libras al año, mientras que los que tienen menos recorrido perciben entre 72.000 y 148.000 libras.
Figuras reconocidas en el arbitraje inglés, como Anthony Taylor y Michael Oliver, forman parte del grupo mejor remunerado, con sueldos que alcanzan el tope de 250.000 libras anuales. Por otro lado, los árbitros con menor experiencia, o de categoría junior, reciben aproximadamente 125.000 libras al año, cifra que aún sigue siendo notablemente alta en comparación con otras ligas.
Bonificaciones e ingresos adicionales
A estos montos base se suman diferentes incentivos económicos. Los árbitros reciben bonificaciones por la cantidad de partidos dirigidos y por sus actuaciones en el campo, lo que les permite aumentar significativamente sus ingresos. Además, aquellos que son seleccionados para impartir justicia en competiciones como la Champions League o torneos organizados por la FIFA también reciben un extra por su participación internacional.
Sin embargo, desde 2023, los árbitros ingleses tienen prohibido dirigir partidos en otras ligas nacionales, como la Pro League de Emiratos Árabes Unidos o la Saudi Pro League, debido a posibles conflictos de intereses. Esta medida ha limitado una fuente de ingresos adicional que algunos colegiados aprovechaban en temporadas anteriores.
¿Cómo se compara con otras ligas?
Si bien los árbitros en Inglaterra gozan de sueldos elevados, en España, por ejemplo, el salario medio anual de un colegiado se sitúa en 265.000 euros, sin contar los ingresos adicionales por dirigir partidos internacionales. Esta cifra demuestra que el arbitraje en las grandes ligas europeas no solo es una profesión de alta responsabilidad, sino también una bien remunerada.
El debate sobre el pago a los árbitros sigue abierto, especialmente considerando la presión y críticas a las que están expuestos en cada jornada. A pesar de los elevados salarios, los colegiados siguen en el centro de la polémica, con decisiones que pueden cambiar el rumbo de un partido o incluso de una temporada completa.