Una final de altísimo nivel y marcada por la intensidad

Las ATP Finals tuvieron un cierre espectacular con el choque entre Jannik Sinner y Carlos Alcaraz, dos de las estrellas más grandes del tenis actual. Ambos llegaron invictos al duelo decisivo, pero fue el italiano quien impuso sus condiciones para levantar el trofeo por segundo año seguido.

Sinner lució dominante, preciso y mentalmente implacable, derrotando a un Alcaraz que luchó hasta el final, pero que también debió lidiar con molestias físicas. El español incluso requirió asistencia médica en el primer set y jugó el resto del partido con un vendaje en el muslo derecho, lo que reflejó el desgaste acumulado tras una semifinal que había terminado varias horas más tarde que la del italiano.

Aun así, Alcaraz mostró destellos brillantes, como una dejada espectacular que lo llevó a tener una bola de set. Pero Sinner, con su poderoso servicio y su frialdad en momentos clave, evitó la caída y forzó un ‘tie-break’ en el que demostró su jerarquía: apenas había perdido tres durante toda la temporada, todos ante el español, y resolvió este con firmeza.

El segundo set confirmó la superioridad del italiano

El inicio del segundo parcial fue prometedor para Alcaraz, quien rompió el servicio de Sinner por primera vez en todo el torneo. Sin embargo, el italiano recuperó la calma, ajustó su defensa y volvió a imponer su ritmo desde el fondo de la cancha.

Cuando Sinner obtuvo su primera oportunidad de quiebre, un golpe extraño favoreció al italiano y cambió la dinámica. A partir de entonces, la consistencia del jugador de San Cándido terminó inclinando la balanza. Alcaraz encontró espacios, pero nunca pudo quebrar la fortaleza mental y táctica del italiano.

En la primera bola de partido, Sinner cerró con autoridad, conquistando nuevamente el título sin haber perdido un solo set en toda la competencia. El público del Inalpi Arena celebró a su nuevo ídolo, que revalidó su reinado en casa.

Sinner, doble Maestro; Alcaraz ya piensa en lo que viene

Con este triunfo, Jannik Sinner confirma su crecimiento como una de las figuras más sólidas del circuito. Su consistencia, su potencia desde el fondo y su evolución mental lo convierten en un rival temible rumbo a 2026.

Por su parte, Carlos Alcaraz, quien mantiene el número uno del ranking, ya enfoca su mirada en la Copa Davis, decidido a recuperarse físicamente y cerrar el año con fuerza.