Un castigo que incomoda

Lionel Messi no se anduvo con rodeos tras el triunfo 2-1 de Inter Miami frente al Atlas en la Leagues Cup. Aunque sumó dos asistencias clave, el argentino reconoció sentirse “pesado” y señaló directamente a la MLS por la sanción que le impidió jugar en la última jornada de liga.

"El otro día no me dejaron jugar y hoy lo noté, sobre todo en el primer tiempo", declaró. Y aunque muchos pensaban que saltarse un partido sería benéfico, el propio Messi lo desmintió: “Para mí es peor, porque necesito competir. Me siento físicamente a medida que juego partidos”.

¿Por qué lo castigaron?

El 10 rosarino fue sancionado por la MLS tras no presentarse al All-Star Game ante las figuras de la Liga MX. La liga tiene una regla estricta: si un jugador convocado no asiste sin lesión justificada, debe perderse automáticamente el siguiente partido oficial de liga.

En el caso de Messi, su ausencia fue vista como una falta al compromiso con el espectáculo. La decisión generó revuelo, especialmente porque se trataba del mayor ídolo de la competición. La liga fue inflexible… y el Inter Miami lo sufrió.

Dos asistencias, pero lejos de su mejor versión

A pesar de la falta de ritmo, Messi fue clave: dio las dos asistencias para los goles de Telasco Segovia y Marcelo Weigandt. Pero su rendimiento no pasó desapercibido ni para él ni para el cuerpo técnico: lento en los arranques, menos participativo y sin la chispa habitual.

La buena noticia fue el debut de Rodrigo De Paul, a quien Messi elogió por su entrega y nivel. “Nos da un salto de calidad”, aseguró. A futuro, la dupla puede ser clave… pero sólo si el 10 recupera el ritmo que lo hizo brillar.