El parón internacional ha vaciado la plantilla del FC Barcelona, pero ha traído consigo una noticia que en el club se recibe con alivio: Raphinha progresa firmemente hacia el tramo final de su recuperación. En un momento marcado por ausencias, polémicas médicas y una enfermería que no termina de vaciarse, el avance del extremo brasileño supone un rayo de luz en la programación de Hansi Flick.

Con buena parte del vestuario repartido entre convocatorias europeas y sudamericanas, el Barça ha optado por mantener su rutina de entrenamientos. Tras la sesión regenerativa del lunes, este miércoles el técnico alemán volvió a reunir a los disponibles en la Ciutat Esportiva Joan Gamper. La imagen fue casi familiar: Alejandro Balde, Eric García, Gerard Martín, Marc Bernal, Joan García, Eder y Szczesny formaron el núcleo del grupo que trabaja en Barcelona mientras el resto de internacionales afrontan compromisos decisivos.

En ese contexto reducido, las miradas se desviaron rápidamente hacia Raphinha. El brasileño continúa siguiendo un plan específico diseñado para acelerar su vuelta y, según fuentes del club, ya se encuentra en la fase final de recuperación. El extremo ha estado entrenando al margen, enfocado en fortalecimiento y trabajo individualizado, un paso indispensable antes de reinsertarse con normalidad en el grupo. El propio entorno técnico reconoce que la evolución del jugador está siendo “muy positiva”.

No fueron los únicos rostros conocidos en la sesión. Gavi y Marc Casadó hicieron acto de presencia, aunque ninguno de los dos participó en los ejercicios colectivos, manteniéndose en actividades específicas que acompañan sus respectivos procesos de rehabilitación.

Primer comunicado oficial sobre Lamine Yamal

La sesión de entrenamiento llegó acompañada de un comunicado que también despejó una incógnita importante: la situación de Lamine Yamal. El Barça confirmó públicamente por primera vez que el delantero ha sido desconvocado por la Real Federación Española de Fútbol, debido al tratamiento que sigue para recuperarse de la pubalgia.

El mensaje del club subrayó que el objetivo es que el futbolista esté “a pleno rendimiento después del parón”, una frase que busca rebajar tensiones tras el roce institucional vivido en las últimas horas.

La Federación, por su parte, había mostrado su malestar al asegurar que el procedimiento —un tratamiento de radiofrecuencia aplicado al pubis— se realizó sin comunicación previa a su cuerpo médico. Según el informe federativo, la recomendación es mantener reposo entre siete y diez días.

Un respiro en medio del caos

Mientras el debate sobre Lamine sigue vivo, la mejor noticia del día para el Barça llega desde el otro costado del campo: Raphinha avanza y apunta a su regreso cuando se reanude la competición. En un parón marcado por la incertidumbre, el brasileño devuelve una dosis necesaria de optimismo.