“Voy a estar mejor que nunca”

Mike Tyson no ha dicho su última palabra. Casi cuarenta años después de haber sido coronado como el hombre más temido del boxeo, “Iron Mike” ha lanzado una nueva advertencia a Floyd Mayweather de cara a su combate de exhibición programado para 2026.

En entrevista con People, Tyson aseguró que esta vez no dejará dudas:

“Va a ser realmente interesante. No me lo puedo creer, desde la última vez que hice esto he peleado dos veces… lo haré mejor en la siguiente.”

A sus 59 años, Tyson se siente más concentrado que nunca. Pese a su derrota frente a Jake Paul en 2024, el excampeón mundial asegura que aprendió una valiosa lección. “Este momento va a pasar. Disfrútalo, no dura para siempre”, reflexionó.

Para Tyson, la pelea ante Mayweather no es solo entretenimiento. Es una oportunidad para demostrar que el fuego competitivo sigue intacto y que, incluso con el paso del tiempo, su espíritu de guerrero permanece vivo.

Mayweather responde: “Mi legado sigue intacto”

El anuncio del combate Tyson–Mayweather no dejó a nadie desapercibido. Dos leyendas, dos filosofías opuestas. Tyson representa la furia y el poder; Mayweather, la precisión y la defensa impenetrable.

Mayweather, de 48 años, no pelea de manera profesional desde su triunfo sobre Conor McGregor en 2017, pero se ha mantenido activo con exhibiciones ante Logan Paul y Deji. “Llevo 30 años haciendo esto y no ha habido un solo luchador que empañe mi legado”, declaró. “Si voy a hacer algo, será grande y legendario”.

Tyson, por su parte, no busca redención mediática ni aprobación. “No podía creerlo hasta que firmó la tarjeta. Él la firmó, así que me lo creo”, dijo entre risas. Para él, enfrentarse a Mayweather es una oportunidad para demostrar que sigue siendo un símbolo de determinación y respeto dentro del deporte.

El renacer de un guerrero

Tras su derrota frente a Jake Paul, muchos pensaron que era el final de la historia para Tyson. Pero el excampeón asegura que esa caída fue el impulso que necesitaba para regresar más fuerte.

“Al día siguiente me desperté y le dije a mi mujer: ‘¿Por qué hice eso?’. No sabía qué demonios pasaba”, confesó a Fox Sports.

Esa autocrítica lo llevó a cambiar su enfoque. “Me estoy preparando y esperando. Es algo maravilloso que podría suceder”, añadió. Tyson ha pasado los últimos meses entrenando intensamente, cuidando su estado físico y mental. Su objetivo no es solo subir al ring, sino demostrar que aún puede ofrecer espectáculo, técnica y corazón.

Incluso a los 59 años, Tyson sigue atrayendo la atención del mundo. Su historia es la de un hombre que cayó y se levantó más de una vez, y que ahora busca cerrar su carrera con una actuación digna de su leyenda.

Dos eras, una misma historia

El combate entre Tyson y Mayweather está previsto para la primavera de 2026 bajo el sello de SCI Sports y Fight Sports. No solo enfrentará estilos, sino también generaciones: el poder brutal del peso pesado contra la elegancia milimétrica del invicto.

Para los aficionados, no se trata de saber quién ganará, sino de presenciar el choque simbólico entre dos íconos que moldearon la historia del boxeo moderno.

Mayweather lo define como “una oportunidad para darle al público lo que quiere”. Tyson, en cambio, lo ve como “algo que ni el mundo ni yo pensábamos que podría suceder”.

Y aunque ninguno está en su mejor momento físico, el magnetismo de ver a Tyson y Mayweather compartir un ring será suficiente para detener el mundo por una noche.
A fin de cuentas, hay promesas que solo Mike Tyson puede hacer… y cumplir.