- Home >
- Boxing >
- Tyson Fury, Amir Khan y Kell Brook le dan el último adiós a Ricky Hatton, leyenda del boxeo inglés
Tyson Fury, Amir Khan y Kell Brook le dan el último adiós a Ricky Hatton, leyenda del boxeo inglés
Manchester se detuvo para despedir a Ricky Hatton, una de las leyendas más queridas del boxeo británico. Desde Tyson Fury hasta Amir Khan, las grandes figuras del deporte se reunieron para rendir homenaje al eterno “Hitman”, símbolo de lucha, humildad y orgullo mancuniano.
Manchester despide a su hijo predilecto
El mundo del boxeo y la ciudad de Manchester se vistieron de luto. Miles de personas salieron a las calles para darle el último adiós a Ricky Hatton, el excampeón mundial que marcó una era con su estilo aguerrido y su conexión única con los aficionados. El “Hitman”, fallecido el 14 de septiembre a los 46 años, fue despedido como lo que fue: un héroe del pueblo.
El cortejo fúnebre partió desde el Cheshire Cheese Pub, en Hyde, muy cerca del hogar de Hatton. Su ataúd azul celeste —un homenaje a su amado Manchester City— fue llevado por su hermano Matthew Hatton y su representante de toda la vida, Paul Speak.
Entre los asistentes destacaron grandes nombres del boxeo británico como Tyson Fury, Amir Khan y Kell Brook, además del músico Liam Gallagher, quien en su día acompañó a Hatton hasta el ring portando sus cinturones de campeón.
La procesión se detuvo en la Catedral de Manchester, donde 900 invitados escucharon los emotivos discursos de sus hijos Campbell, Millie y Fearne, así como un mensaje lleno de amor de su madre, Carol Hatton. El recorrido culminó en el Etihad Stadium, casa del Manchester City, para el último adiós a uno de los hijos más ilustres de la ciudad.
El ascenso y la gloria del “Hitman”
Con un estilo agresivo y un carisma inigualable, Ricky Hatton pasó de pelear en pequeños gimnasios a llenar arenas y conquistar el mundo. Su consagración llegó en 2005, en el Manchester Arena, cuando derrotó al legendario Kostya Tszyu y se coronó campeón mundial de la IBF y de la revista The Ring en el peso superligero.
A partir de ahí, su popularidad se disparó. Decenas de miles de fanáticos lo siguieron incluso a Estados Unidos, donde enfrentó a figuras como Luis Collazo, Floyd Mayweather Jr. y Manny Pacquiao. Aunque su carrera tuvo altibajos, su espíritu de lucha y cercanía con la gente lo convirtieron en un ídolo inmortal.
Tras su retiro en 2012, luego de caer ante Vyacheslav Senchenko, Hatton se reinventó como promotor, entrenador y comentarista. Además, guió los primeros pasos profesionales de su hijo Campbell Hatton, continuando así el legado familiar dentro del boxeo.
Un legado que trasciende el ring
Más allá de los títulos y los triunfos, Ricky Hatton será recordado como un hombre del pueblo. Su sencillez, su amor por Manchester y su entrega sobre el cuadrilátero lo convirtieron en un símbolo eterno del deporte británico.
Deja tres hijos —Campbell, Millie y Fearne—, una nieta llamada Lyla, y a sus padres Carol y Ray. Su hermano Matthew Hatton también siguió sus pasos como boxeador profesional.
Hoy, Manchester llora la partida de su campeón, pero también celebra la vida de un guerrero que jamás olvidó de dónde venía. Porque aunque “The Hitman” ya no está, su espíritu sigue golpeando fuerte en el corazón del boxeo inglés.