Contra los Nets, Antetokounmpo anotó 29 puntos para ayudar a Milwaukee a romper una racha de siete derrotas y, con un triple en el tercer cuarto, se convirtió en el sexto jugador más joven en alcanzar los 21,000 puntos en temporada regular.

A sus 30 años, a solo días de cumplir 31, se unió a un grupo encabezado por James, Michael Jordan, Kobe Bryant, Kevin Durant y Wilt Chamberlain como los únicos jugadores en llegar tan rápido a esa cifra.

Tras el partido, el dos veces MVP dejó claro que ve el hito como un punto de control y no como un destino final. Antetokounmpo afirmó que cree poder alcanzar el puesto número 1 en la lista de anotación dentro de cuatro o cinco años, imaginándose a sí mismo a los 35 años en la cima de un ranking actualmente dominado por James.

La montaña matemática que se avecina

La cifra de James se sitúa en aproximadamente 42,250 puntos y sigue creciendo mientras la estrella de los Lakers continúa anotando a nivel All-Star en su temporada número 23.

Antetokounmpo, con 21,002 puntos, ocupa el puesto 42 de todos los tiempos y está a más de 21,000 puntos del récord, lo que esencialmente significa que tendría que replicar toda su producción de carrera solo para alcanzar la marca.

Los modelos de proyección sugieren que el período de cuatro a cinco años es casi imposible. Incluso manteniendo un promedio superior a 30 puntos por partido, Giannis tendría que combinar su máximo nivel de anotación con una durabilidad extrema durante casi una década, un estándar que solo James ha alcanzado en la historia moderna de la NBA.

Legado, confianza y camino realista

Tenga o no éxito en superar a James, la persecución de Antetokounmpo añade una capa atractiva a un currículum ya de por sí destacado.

Promedia 30,9 puntos en las primeras semanas de esta temporada, buscando un cuarto año consecutivo por encima de los 30 puntos mientras sigue siendo un candidato constante a MVP y al Jugador Defensivo del Año.

El camino más realista sería que Giannis ascienda gradualmente hasta el top 10 o incluso el top cinco si mantiene su salud hasta finales de los 30, un escenario que los analistas consideran desafiante pero alcanzable.

Por ahora, su disposición a hablar del récord como si ya existiera dice tanto sobre su instinto competitivo como sobre la magnitud de la montaña que intenta escalar para alcanzar el histórico estándar de LeBron.