Los Kansas City Chiefs, con un Patrick Mahomes que se robó las miradas al final del partido, mantuvieron su invicto en la temporada 2024 al derrotar en tiempo extra 30-24 a los Tampa Bay Buccaneers en el cierre de la semana 9. 

El campeón de la NFL ahora presume una marca perfecta de 8-0, reafirmándose en la cima de la Conferencia Americana y consolidándose como el equipo a vencer en toda la liga. En cambio, Tampa Bay, a pesar de la derrota, conserva el segundo lugar en el Sur de la Conferencia Nacional, con 4 victorias y 5 derrotas.

Mahomes fue la pieza clave al lanzar para 291 yardas y tres pases de anotación, aunque tuvo que lidiar con la presión de la defensa de los Buccaneers, que lo capturaron en cuatro ocasiones. Desde el inicio del juego, Kansas City tomó ventaja con un gol de campo de Harrison Butker que los puso 3-0 en el primer cuarto.

Los Buccaneers reaccionaron en el segundo cuarto, dándole la vuelta al marcador con una serie ofensiva de 11 jugadas y 70 yardas que culminó en un acarreo de anotación de Rachaad White. A pesar de la ausencia de sus estrellas ofensivas, Mike Evans y Chris Godwin, los Bucs se fueron al frente 7-3.

Sin embargo, los Chiefs respondieron con su característico juego aéreo. Mahomes conectó un pase de touchdown con DeAndre Hopkins en una serie de 70 yardas para recuperar la ventaja 10-7 antes de ir al descanso.

Ya en el tercer cuarto, Tampa Bay volvió a tomar el control con un pase de anotación de Baker Mayfield a Cade Otton, que los puso 14-10, y más tarde Chase McLaughlin extendió la ventaja a 17-10 con un gol de campo.

Los Chiefs empataron el marcador 17-17 al inicio del último cuarto con otro pase de Mahomes, esta vez a Samaje Perine. Pero el susto para Kansas City llegó cuando Patrick Mahomes pisó en falso, salió adolorido de la rodilla izquierda, y por un momento pareció que no podría regresar. Aunque preocupó a la afición, Mahomes volvió al campo y lideró una serie épica de 15 jugadas y 78 yardas, culminada con otro envío a Hopkins para poner a los Chiefs al frente 24-17.

Pero los Buccaneers no se dieron por vencidos y, con una serie de 71 yardas, lograron empatar 24-24 gracias a un pase a Ryan Miller, enviando el partido a tiempo extra. 

En la primera ofensiva del tiempo extra, Kareem Hunt, quien cerró con 106 yardas en el partido, anotó en un acarreo que aseguró la victoria y mantuvo a los Chiefs invictos en una noche que incluyó drama, lesiones y, al final, una celebración para la escuadra de Kansas City.