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El Sevilla volvía a la UEFA Europa League y el regreso de su competición favorita le ayudó a recuperar la sonrisa. Los de Nervión vencieron por 0-1 en su visita a la Lazio y encarrilan su pase a octavos de final y, de paso, espantan los fantasmas de su última mala racha con una victoria a domicilio.

El equipo de Machín llegaba al Olímpico de Roma tras encadenar una racha de 2 victorias en sus últimos 10 partidos y sólo habían ganado 2 partidos a domicilio desde septiembre pero, la Europa League es el torneo que siempre ha cambiado la vida y la cara del Sevilla. El técnico soriano apostó por colocar a su once de gala, donde sólo regresaban Mercado y Sergi Gómez en la defensa.

La apuesta le salió bien, los dos centrales dieron más experiencia y fiabilidad a la zaga, mientras que Kjaer se merendó a Caicedo, titular por el lesionado Immobile, en los balones aéreos. De hecho, entre el danés y Vaclik sacaron la única ocasión de peligro claro de la Lazio en todo el partido, que perdió a su brújula en el descanso por la lesión de Luis Alberto y sólo era capaz de crear dudas en el Sevilla cuanso lograba trazar una transición rápida.

Al Sevilla le bastó con defender bien, sobre todo en la segunda parte amasando la posesión, y con el acierto de su mejor goleador, Ben Yedder, para volver a la senda de la victoria y dejar muy de cara su pase a la siguiente ronda. El franco tunecino marcó el pase a Sarabia, que lo leyó a la perfección y lo dejó para sólo tener que empujarla.

En la recta final de la segunda parte, el Sevilla pudo incluso acabar sentenciado su pase pero Escudero y Franco Vázquez no fueron capaces de definir dos contragolpes claros y el duelo aún tendrá que decidirse el próximo miércoles en el Sánchez-Pizjuán.