Desde su llegada, Antonio Rüdiger ha dejado momentos memorables con el Real Madrid, pero ninguno como el de esta noche ante el Atlético de Madrid en los octavos de final de la UEFA Champions League. El defensor alemán fue el encargado de ejecutar el penal decisivo que le dio la victoria al equipo de Carlo Ancelotti.

Rüdiger cobró el quinto penal en un momento crucial, justo después de la falla de Marcos Llorente, asumiendo toda la responsabilidad. Con un disparo potente y al centro, logró batir a Jan Oblak, quien, a pesar de tocar el balón, no pudo evitar el gol. Acto seguido, el alemán desató la euforia corriendo por todo el campo para celebrar, mientras sus compañeros lo perseguían en medio de la locura madridista en el estadio rival.

Un partido de alta tensión

El Atlético de Madrid comenzó con un impacto inmediato, igualando la eliminatoria en apenas 27 segundos con un gol de Conor Gallagher. A lo largo del partido, el equipo rojiblanco tuvo varias oportunidades para completar la remontada, pero Thibaut Courtois fue clave con sus atajadas.

En la segunda parte, el Real Madrid tuvo una oportunidad de oro con un penalti a favor de Vinícius Júnior, pero el brasileño falló. Con el partido muy parejo y con ambos equipos mostrando desgaste en la prórroga, el duelo se definió desde los once metros.

La tanda de penales y el boleto a cuartos

En la definición, Kylian Mbappé, Alexander Sørloth y Jude Bellingham convirtieron, mientras que Julián Álvarez resbaló, anulando su gol. Federico Valverde amplió la ventaja para el Madrid, Ángel Correa mantuvo con vida al Atlético, y Oblak detuvo el disparo de Lucas Vázquez. 

Sin embargo, el remate de Marcos Llorente se estrelló en el poste, dejando el destino en los pies de Rüdiger, quien no falló y selló la clasificación merengue. El Real Madrid, una vez más, sobrevivió a un duelo agónico y avanzó a los cuartos de final, donde se enfrentará al Arsenal en la siguiente ronda.