El Real Madrid ha tomado una postura firme respecto al futuro de Arda Güler, su joven promesa turca. Según informó Defensa Central, el club merengue declinó este verano una oferta de 50 millones de euros por el talentoso centrocampista, dejando claro que su apuesta por él es a largo plazo.

El interés por Güler no sorprende, ya que su proyección y rendimiento han crecido notablemente en comparación con la pasada temporada. La mejora física y técnica del jugador ha sido evidente, algo que no ha pasado desapercibido para Xabi Alonso, quien confía plenamente en que el futbolista será pieza clave durante la campaña.

Confianza total en el joven talento

Fuentes cercanas al club afirman que la decisión de rechazar una suma tan elevada responde no solo al potencial futbolístico de Güler, sino también a la visión de que su valor de mercado podría aumentar aún más si sigue en la misma línea ascendente. En el seno del vestuario existe la convicción de que el mediocampista puede convertirse en uno de los referentes del equipo en un futuro cercano.

Este respaldo llega en un momento crucial para el turco, que ahora dispone de más minutos y oportunidades para demostrar su calidad en una plantilla exigente como la del Real Madrid.

Reinier pone fin a su etapa como madridista

Por otra parte, el Real Madrid anunció este viernes la salida de Reinier Jesus Carvalho, quien se incorporará al Atlético Mineiro de Brasil. El mediapunta, de 23 años, llegó en 2019 procedente del Flamengo y, tras un paso por el filial Castilla, acumuló cesiones en el Borussia Dortmund, el Girona, el Frosinone y el Granada.

En un comunicado oficial, la entidad blanca expresó su agradecimiento y cariño hacia el futbolista, deseándole lo mejor para esta nueva etapa profesional.

La marcha de Reinier contrasta con la firmeza en la continuidad de Güler, reflejando dos caminos distintos: uno de despedida y otro de consolidación. Mientras uno busca relanzar su carrera en su país, el otro afronta el desafío de ganarse un lugar estable en uno de los clubes más competitivos del mundo.

Con estas decisiones, el Real Madrid deja claro que su estrategia pasa por proteger a sus jóvenes talentos más prometedores, resistiendo ofertas millonarias si consideran que el jugador tiene un papel relevante en su proyecto deportivo.