El Barcelona atraviesa un momento clave en la gestión de la salud de Gavi, quien arrastra molestias en la rodilla derecha tras un golpe que lo dejó fuera del duelo ante el Rayo Vallecano y también de la convocatoria de la selección española. El club, consciente del historial médico del andaluz, apuesta por un plan de recuperación conservador que evite riesgos innecesarios.

Tratamiento con enfoque paciente

El golpe recibido generó cierta alarma dentro del vestuario culé, principalmente porque la zona afectada es la misma rodilla en la que Gavi sufrió una grave lesión de ligamentos que lo mantuvo once meses alejado de las canchas. Aunque algunos medios han especulado sobre la posibilidad de que el jugador se someta a una artroscopia, los servicios médicos del club insisten en que no es necesario precipitarse con una intervención quirúrgica.

El plan establecido contempla un tratamiento de fisioterapia y reposo que debería eliminar las molestias en un plazo aproximado de tres semanas. En caso de que la recuperación sea más rápida, el mediocampista podría reincorporarse antes; si los dolores persisten, entonces se valorará otro tipo de alternativas médicas más intervencionistas.

Impaciencia del jugador, calma en el club

Fuentes cercanas a Gavi aseguran que el futbolista se muestra ansioso por volver a la actividad, pues quiere ayudar cuanto antes al equipo en una temporada que será exigente. Sin embargo, en el Barcelona prevalece la calma y se insiste en que lo más importante es garantizar que el jugador se recupere plenamente para evitar recaídas.

La prudencia responde no solo a la lesión previa, sino también a la importancia de tener al joven centrocampista disponible en óptimas condiciones para los próximos retos del equipo en LaLiga y la Champions League. “Es mejor esperar y cuidar cada detalle”, señalan voces del entorno médico blaugrana, que no comparten el alarmismo que circula en ciertos sectores mediáticos.

Una decisión estratégica para el futuro

El Barcelona se ha dado un plazo de tres semanas para evaluar la evolución del jugador. Si las molestias desaparecen dentro de ese margen, Gavi volverá a entrenar progresivamente hasta estar listo para competir. La estrategia responde a la intención de pensar en el largo plazo, entendiendo que la temporada es extensa y que el jugador de 22 años es una pieza clave en el proyecto del club.

De momento, la prioridad es la paciencia. La apuesta es clara: nada de cirugías apresuradas, solo fisioterapia y trabajo controlado. El objetivo es que Gavi regrese con seguridad, en plenitud física y con la confianza necesaria para volver a brillar con la camiseta azulgrana.