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Atlético de Madrid se había atascado frente a Málaga. Los rojiblancos no conseguían derribar el muro formado por Javi Gracia y, para peor, tuvieron que jugar el segundo tiempo sin Diego Simeone. El técnico fue expulsado al término del primer tiempo y ya no volvió a salir al campo de juego. Pero cuando todo hacía imaginar un pobre empate, apareció Ángel Correa precisamente como lo que es para este equipo, un 'Ángel'.

El delantero saltó a la cancha en el complemento por el lesionado Yannick Carrasco, pero nada hacía prever que sería quien detonaría el partido. Un remate desde lejos que golpeó en un rival, y gol. El Vicente Calderón enloqueció al ver cómo el esfuerzo tiene recompensa. Los hinchas estaban indignados con la actuación arbitral, pero todo quedó atrás con el tanto de Correa. 

Lo cierto es que Diego no viene confiando al 100% en su compatriota, seguramente por su juventud e inexperiencia, pero el jugador está respondiendo como todo un futbolista consagrado. Cada vez que entra, o asiste o marca goles él mismo. Tiene todo para convertirse en titular y pelearle el puesto a Carrasco aunque todavía deberá demostrar que tiene la regularidad requerida.

Por el momento, está consiguiendo levantar al Calderón en cada partido en el que ingresa. Esta vez sumó otro tanto a su cuenta particular para continuar con su meteórico crecimiento. Todavía le hace falta demostrar que puede tener la regularidad necesaria para pelear por un puesto en el once. La titularidad se cotiza cara en este Atlético, aunque si Correa continúa jugando como hasta ahora, podemos estar seguros de que tendrá el lugar que merece dentro del campo de juego.