Un Barça que piensa en el presente… y en el futuro

Hansi Flick trabaja con la mirada dividida: por un lado, intentar recuperar el liderato de LaLiga y asegurar la clasificación directa a octavos de Champions; por el otro, planificar desde ya la plantilla del próximo curso. El técnico alemán, junto al director deportivo Deco y la comisión deportiva, ha definido una hoja de ruta clara: el Barça deberá reforzarse con un central zurdo, un extremo y un delantero centro.

Un central zurdo, la prioridad absoluta

La salida inesperada de Iñigo Martínez en verano dejó al equipo sin un perfil que Flick considera esencial. Sin un zurdo natural en la zaga, la defensa ha perdido equilibrio, automatismos y capacidad para interpretar la línea del fuera de juego, algo que Iñigo dominaba a la perfección.

La consecuencia ha sido evidente: Cubarsí ha tenido que adaptarse fuera de su rol habitual y el resto de centrales no han logrado replicar esa lectura defensiva tan específica.

Por eso, la directiva contempla incluso acelerar la llegada del central ya en enero, siempre y cuando el fair play financiero lo permita. No será fácil: el mercado invernal ofrece pocas oportunidades y Flick insiste en que el refuerzo debe ser un zurdo natural, no una solución improvisada.

Los nombres que maneja el club son:

Gonçalo Inácio (Sporting), Murillo (Nottingham), Nico Schlotterbeck (Dortmund), Benedetti (Palmeiras) y Marc Guéhi (Crystal Palace), este último quedando libre en junio.

El nuevo ‘9’: la vida después de Lewandowski

Con Lewandowski entrando en el último año de contrato y cumpliendo 38 años el próximo verano, el Barça ya asume que debe fichar a un delantero titular.
Julián Álvarez es uno de los favoritos, pero la reciente entrada del fondo Apollo como inversor del Atlético de Madrid podría complicar cualquier negociación directa con el City o alterar el mercado en esa posición.

Por eso la alternativa Harry Kane gana fuerza: su cláusula de 65 millones sería una operación más accesible… y Flick lo conoce a la perfección de su etapa en la Bundesliga.
El sueño Haaland también se ha mencionado internamente, pero dentro del club lo consideran un escenario irreal.

Un extremo polivalente para completar el ataque

El tercer refuerzo sería un extremo capaz de jugar por ambas bandas y ofrecer profundidad. El club valora seriamente ejecutar la opción de compra sobre Marcus Rashford, fijada en 30 millones, aunque su continuidad dependerá de su rendimiento esta temporada.

Otros nombres están sobre la mesa, como Rafael Leão, una oportunidad siempre deseada pero difícil por coste y competencia.

Además, el Barça debe estar preparado ante un posible movimiento inesperado: Raphinha, de 29 años, sigue recibiendo ofertas de Arabia Saudita y podría plantearse una salida si llega una propuesta irrechazable.