De jugador histórico a técnico del filial

Álvaro Arbeloa, actual entrenador del Juvenil A del Real Madrid, ha sido elegido como el nuevo director técnico del Castilla, ocupando el lugar que dejó vacante Raúl González tras anunciar su salida del club.

Nacido en Salamanca, pero formado desde los cuatro años en Zaragoza, Arbeloa comenzó su camino en el fútbol en el Colegio El Salvador, pasó por las fuerzas básicas del Real Zaragoza y en 2001 se unió a las categorías juveniles del Real Madrid. En la temporada 2004/05 fue parte clave del ascenso del Castilla a Segunda División, junto a otros talentos como Juan Mata, Rubén de la Red, Esteban Granero, Roberto Soldado y Álvaro Negredo.

Su debut en la Primera División llegó en 2004 ante el Betis, pero al no tener muchas oportunidades, fue transferido al Deportivo La Coruña. Luego dio el salto al Liverpool bajo el mando de Rafa Benítez, donde jugó principalmente como lateral izquierdo. En 2009 regresó al Real Madrid, donde se consolidó como un jugador muy querido por la afición.

Títulos, legado y un nuevo reto

Durante sus siete temporadas con el primer equipo del Real Madrid, Arbeloa disputó 238 partidos y ganó múltiples títulos: dos Champions League, un Mundial de Clubes, una Supercopa de Europa, una Liga, dos Copas del Rey y una Supercopa de España.

A nivel internacional, debutó con la Selección Española en 2008 y acumuló 56 partidos, siendo parte de la generación que conquistó la Euro 2008, el Mundial de Sudáfrica 2010 y la Euro 2012.

Tras retirarse como jugador en 2017, inició su carrera como entrenador en la cantera del Real Madrid en 2020. Primero dirigió al Infantil A, con el que fue campeón de liga; después al Cadete A, y desde 2022, lideró al Juvenil A, equipo con el que logró el triplete nacional en la temporada 2022-23.

Ahora, Álvaro Arbeloa tiene el reto de tomar el mando del Castilla, en reemplazo de una leyenda como Raúl, quien estuvo al frente del equipo durante seis campañas en la Primera RFEF. Su llegada marca la continuidad del proyecto formativo del club, apostando por entrenadores con identidad merengue y experiencia desde las bases.