El Liverpool arrancó la temporada con un duro golpe al caer en la Community Shield frente al Crystal Palace, en un duelo que se definió en la tanda de penaltis (2-2, 3-2). El contraste fue evidente: los Reds, que invirtieron cerca de 300 millones de dólares en fichajes este verano, no pudieron superar a un Palace que apenas gastó dos millones en refuerzos.

¿Cómo se desarrolló la final?

El encuentro disputado en Wembley tuvo una primera parte con tintes de pretemporada, pero llena de acción. En su debut oficial, Hugo Ekitiké adelantó al Liverpool tras una asistencia de Florian Wirtz. El Palace reaccionó rápido: Jean-Philippe Mateta falló un mano a mano, pero forzó un penalti cometido por Virgil van Dijk, que él mismo convirtió para el 1-1.

Poco después, Jeremie Frimpong sorprendió con un centro que terminó en gol, devolviendo la ventaja al Liverpool (1-2). Sin embargo, los dirigidos por Oliver Glasner no se rindieron y, a 13 minutos del final, Ismaila Sarr empató con un potente disparo al primer palo tras un pase filtrado de Adam Wharton.

¿Qué pasó en la tanda de penaltis?

El empate llevó el duelo a la definición desde los once pasos. Mohamed Salah abrió la tanda para el Liverpool con un disparo alto que se fue por encima del travesaño, marcando el tono para lo que vendría. El portero Dean Henderson se convirtió en héroe al detener los lanzamientos de Alexis Mac Allister y Harvey Elliott.

Pese a los fallos de Eberechi Eze y Borna Sosa, el Palace cerró la tanda con éxito y levantó la Community Shield por primera vez en su historia, sumando su segundo título en pocos meses tras conquistar la FA Cup.

El golpe es significativo para el Liverpool de Arne Slot, que debutaba con un título en juego, mientras que el Crystal Palace confirma que puede competir de tú a tú con los gigantes de la Premier League, incluso con presupuestos muy distintos.