La historia de Giovani Dos Santos es una montaña rusa que combina éxito, promesas incumplidas y, ahora, un renacer en el ámbito empresarial. Tras debutar en el Barcelona como una de las mayores promesas de La Masía y ser bautizado como “el nuevo Messi”, el mexicano vivió una carrera futbolística marcada por altibajos. Sin embargo, lo que parecía el cierre de un capítulo con su retiro en 2021, a los 32 años, ha dado paso a una nueva faceta llena de éxito y estabilidad.  

Luego de su despedida del fútbol profesional, Gio decidió incursionar en el mundo empresarial, apostando por sectores de alta rentabilidad. Actualmente, es socio de Procura México, una empresa química que colabora estrechamente con Petróleos Mexicanos (PEMEX). Esta inversión le genera ingresos anuales estimados entre 400,000 y 500,000 dólares, consolidándose como un empresario exitoso en un terreno completamente diferente al que lo vio brillar como atleta.  

Además, Dos Santos ha diversificado sus negocios, participando en la compra y venta de autos de lujo en México, un mercado en auge. Este modelo de negocio no solo le permite mantener una fortuna considerable, sino que también refleja su capacidad para reinventarse más allá de los reflectores deportivos. 

La transición de Giovani no ha sido solo económica, sino también personal. En entrevistas recientes, ha destacado cómo este cambio le ha permitido enfocarse en aspectos fundamentales de su vida, alejándose de las presiones del fútbol profesional. Esta nueva estabilidad parece ser el motor de su éxito actual, demostrando que hay vida después del deporte de élite.