Un anuncio que sacude a la UFC

Ilia Topuria, doble campeón invicto de la UFC, sorprendió al mundo de las artes marciales mixtas al anunciar que no podrá defender su cinturón durante el primer trimestre de 2026. La noticia, que ya había generado especulación en el entorno del octágono, tomó una dimensión completamente distinta cuando el propio peleador decidió emitir un comunicado público para explicar las razones detrás de su ausencia.

Lejos de tratarse de una cuestión deportiva o física, Topuria dejó claro que atraviesa una situación personal extremadamente delicada que lo obligó a priorizar su estabilidad familiar y emocional. La UFC, según explicó el propio campeón, comprendió el contexto y aceptó su decisión, aunque eso derivará en la disputa de un título interino mientras él se mantiene alejado del octágono.

Una situación personal que lo llevó a los tribunales

En su comunicado, Topuria reveló que el origen del problema está en su separación con Giorgina Uzcategui Badell, madre de su hija menor. El peleador explicó que la situación escaló hasta instancias judiciales tras lo que describió como presiones y amenazas intolerables durante los últimos meses.

Según detalló, esas presiones incluían intentos de extorsión y advertencias sobre la difusión de acusaciones falsas, lo que lo llevó a reunir pruebas —audios, mensajes, testimonios y videos— que ya están en manos de la justicia. El campeón fue enfático al señalar que su decisión de hablar públicamente no fue impulsiva, sino una respuesta a la necesidad de frenar una situación que ponía en riesgo su nombre, su paz y a su familia.

El silencio como protección… hasta que dejó de serlo

Topuria explicó que durante meses optó por el silencio para proteger a sus hijos, a quienes definió como el pilar central de su vida. Sin embargo, reconoció que llegó un punto en el que callar dejó de ser una forma de protección y comenzó a permitir que la desinformación creciera.

En uno de los pasajes más contundentes del comunicado, el campeón aseguró que nunca ha ejercido violencia contra nadie y que sus valores siempre han estado ligados al respeto, la disciplina y la honestidad. Con ese mensaje, buscó no solo defender su imagen, sino también enviar un mensaje a quienes atraviesan situaciones similares, alentándolos a no ceder ante la presión o el miedo.

Un paréntesis obligado en su carrera deportiva

La decisión de Ilia Topuria tiene consecuencias directas en la UFC, que celebrará una pelea por el título interino de su división mientras el campeón se mantiene fuera de competencia. Aun así, el peleador dejó claro que su ausencia no significa una renuncia, sino una pausa necesaria para resolver un conflicto que considera prioritario.

Por ahora, Topuria aseguró que no hará más declaraciones públicas por respeto a sus hijos y al proceso judicial en curso. Confía en que la justicia esclarecerá los hechos y permitirá que, más adelante, pueda volver a enfocarse plenamente en el deporte. Mientras tanto, el mundo de la UFC observa en silencio uno de los capítulos más complejos en la vida del campeón invicto.