El ex campeón de la NBA Kendrick Perkins encabezó el coro de escépticos, burlándose de los Clippers al llamarlos “el asilo de ancianos de la NBA” en televisión nacional y redes sociales.

“Oficialmente se han convertido en el asilo de ancianos de la NBA para jugadores que están en el ocaso de sus carreras”, declaró Perkins, desestimando la decisión como un gesto más sentimental que estratégico y sembrando dudas sobre si el reencuentro de Paul con Los Ángeles tendrá un impacto real en la dura lucha por los playoffs del Oeste.

Preocupaciones por la edad, la profundidad y la posibilidad real de competir

La crítica de Perkins se basa en datos concretos. Los Clippers han apostado fuerte por la experiencia en esta postemporada, incorporando no solo a Chris Paul, de 40 años, sino también a veteranos como Brook Lopez, Bradley Beal y John Collins para reforzar a las estrellas Kawhi Leonard y James Harden.

Con Harden a punto de cumplir 36 años y Leonard, Lopez y Nicolas Batum todos por encima de los 34, surgen preguntas legítimas sobre la durabilidad del plantel y si este equipo puede soportar el desgaste de una temporada de 82 partidos más una exigente postemporada.

“Si creemos que esto va a cambiar algo para los Clippers en cuanto a ser verdaderos competidores —no solo aspirantes al título, sino competidores reales en el duro Oeste—, no es así… Los Clippers se ven viejos”, añadió Perkins.

Sin embargo, hay matices detrás del escepticismo. El rol de Paul será el de un base suplente con capacidad de creación, encargado de estabilizar la segunda unidad y dar descanso a Harden, una función que faltó en el plantel de la temporada pasada. Aunque Kris Dunn es elogiado por su defensa, a los Clippers les faltaba un generador ofensivo desde el banco—un vacío que Paul podría llenar si logra mantenerse sano.

La temporada pasada, Paul demostró resistencia y eficiencia al disputar los 82 partidos con los Spurs, promediando 8.8 puntos y 7.4 asistencias en minutos limitados. El presidente de los Clippers, Lawrence Frank, calificó a Paul como “uno de los jugadores más impactantes que jamás haya vestido el uniforme de los Clippers”, destacando no solo su valor en la cancha, sino también su liderazgo y su capacidad para marcar el tono dentro del vestuario.

Panorama de los Veteranos: ¿Nostalgia o Estrategia?

La apuesta de los Clippers se resume en equilibrar la nostalgia con la necesidad. El regreso de Chris Paul es un retorno sentimental tanto para el jugador como para la franquicia: la era de “Lob City”, liderada por él, transformó la imagen y las expectativas del equipo hace más de una década.

Pero críticos como Kendrick Perkins creen que la emoción está pesando más que la lógica en la construcción del plantel, especialmente cuando sus rivales en el Oeste apuestan por núcleos más jóvenes, profundos y atléticamente explosivos.

Algunos aplauden que los Clippers le den a Paul un cierre digno a su carrera de Salón de la Fama y ven valor práctico en aprovechar su inteligencia en minutos controlados. Otros temen que la acumulación de estrellas veteranas, por más laureadas que sean, exponga a los Clippers a los mismos problemas de lesiones e inconsistencia que los han frenado en temporadas recientes.