Stephen Curry, ahora con 37 años y el corazón de los Golden State Warriors, inicia su decimoséptima temporada profesional plenamente consciente del creciente escepticismo: ¿será demasiado mayor para seguir siendo el motor de un equipo campeón?

A pesar de los rumores sobre su disminución de velocidad y la narrativa del “núcleo envejecido”, la temporada 2024-25 de Curry contó otra historia. Promedió 24.5 puntos, 4.4 rebotes y 6.0 asistencias en 70 partidos, llevó a los Warriors a otra clasificación a los playoffs y fue seleccionado para su undécimo Juego All-Star.

Curry ignora las dudas externas con su característica compostura. En una entrevista con NBC Sports Bay Area, declaró: “Con la edad viene la sabiduría… tomaremos el edadismo y todo eso con calma y seguiremos adelante.”

Para Curry, lo que impulsa su longevidad no es silenciar a los críticos, sino un impulso personal basado en la gratitud, la autodisciplina y el disfrute del juego.

Ganar otro título, insiste, “se trata realmente del proceso que conduce a ello… no puedes perseguir esas cosas. Es el proceso al que te comprometes. Suena aburrido y tedioso, pero es la única forma de llegar a donde quieres.”

Liderar con el Ejemplo: Transformación, No Solo Tradición

Curry sigue definiendo una era, no solo con su tiro de tres puntos, sino con un estilo de liderazgo basado en la humildad, la concentración y en invitar a sus compañeros a disfrutar del esfuerzo diario. Incluso mientras la plantilla de los Warriors envejece y la cultura de juventud de la NBA se acelera, el enfoque de Curry trasciende la producción en la cancha.

Ha sido elogiado por inspirar a la próxima generación, como lo demuestra su mensaje viral a los novatos del Draft de la NBA 2025: “Confíen en el camino. Lo que ahora parece incierto podría estar preparándolos para algo más grande.”

Compañeros y entrenadores destacan su liderazgo, marcado no por motivaciones ruidosas, sino por la “alegría”, el mismo ancla que mantiene un equipo veterano unido frente a los desafíos.

Persiguiendo la Grandeza a Su Manera

Con un estatus legendario consolidado—cuatro títulos, dos MVP, oro olímpico y el récord histórico de triples de la NBA—, el enfoque de Curry es singular: seguir evolucionando y seguir compitiendo.

Es abiertamente realista: ganar un quinto campeonato no está garantizado para esta plantilla de los Warriors, pero la edad no es un descalificador. El trabajo continúa, el amor por el juego persiste y los escépticos son, como siempre, solo ruido de fondo.

La historia de Curry no se trata de recuperar viejas glorias. Se trata de redefinir lo que significan la longevidad y el liderazgo en la era moderna del baloncesto.

Al comenzar otra temporada, el veterano base demuestra una vez más que la verdadera batalla nunca es solo contra el tiempo, sino contra la complacencia misma.