Catalina Uribe

Hace un año, el mundo del deporte se vio sacudido por el fallecimiento de la leyenda del baloncesto Kobe Bryant, quien murió junto a otras ocho personas en un accidente, cuando el helicóptero en el que viajaba se estrelló en el área de Calabasas, cerca de Los Ángeles.

El 26 de enero de 2020, Bryant viajaba en su helicóptero privado, un Sikorsky S-76, cuando éste se precipitó contra el suelo y se vio envuelto en llamas. Personal de emergencias acudió al lugar del siniestro y se confirmó que no había sobrevivido ninguno de los pasajeros. Entre las otras víctimas está su segunda hija, Gianna, de 13 años.

Lo más triste de esta noticia fue que nadie se esperaba que 'Black Mamba' partiera tan pronto de este mundo, en especial en medio de circunstancias tan trágicas e inesperadas. Además, las investigaciones sobre el accidente todavía no han arrojado nada definitivo.

Por eso, un año después de esta tragedia, quiero hacerle un homenaje al Kobe atleta, que brilló con Los Ángeles Lakers, con los que jugó 20 años y ganó cinco anillos de la NBA, dos premios al jugador más valioso de las finales, además de ser el MVP de la liga en 2008.  

Su leyenda también se extiende a la selección estadounidense, con la que ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 y Londres en 2012.

Todos esos logros llevaron a que el 4 de abril de 2020 fuera elegido póstumamente para formar parte de la clase del 2020 del Basketball Hall of Fame.

Pero sus habilidades trascendían a las canchas de básquet, pues en 2018 se convirtió en el primer ex deportista en ganar un premio Óscar por el corto de animación 'Dear Basketball', con el cual se despidió como atleta profesional el 18 de diciembre de 2017.

Pero también quiero recordar a Kobe el hombre, quien deja un gran vacío en las vidas de su esposa, Vanessa Laine, con quien se casó en 2001, así como de sus otras tres hijas, Natalia, Bianca, y la recién nacida Capri.

Además del baloncesto, su otra gran pasión fue el fútbol, pues mientras crecía en Italia aprendió a jugar, e incluso era conocido su amor por el AC Milan.

Otra cosa que destacaba en su vida era su fe católica, la cual era muy importante para él y su familia. Incluso, él mismo comentó que fue clave para enfrentar momentos duros en su vida. "Lo único que me ayudó realmente durante ese proceso –soy católico, crecí como católico, mis hijos son católicos– fue hablar con un sacerdote", dijo.

Así mismo, horas antes del accidente él y Gianna fueron a misa en la Iglesia de Nuestra Señora Reina de los Ángeles en Newport Beach, donde también recibieron la Sagrada Comunión, lo que les ayudó a dejar este mundo en paz y en unión con el Señor.

Ahora sólo me queda unirme al homenaje que el mundo del deporte hace a esta leyenda, a la que nunca olvidaremos, además de agradecerle por todo lo que hizo por su amado baloncesto.

Descansa en paz Kobe Bryant.