LeBron James revela si entrenará tras su retiro de la NBA
A medida que LeBron James se acerca al ocaso de su legendaria carrera como jugador, la especulación sobre su futuro fuera de las canchas ha sido constante.
¿Se convertiría el cuatro veces campeón de la NBA y prodigio del baloncesto en entrenador, siguiendo los pasos de otras leyendas? LeBron ha puesto fin a esos rumores con una respuesta clara y contundente.
En un reciente episodio de su podcast “Mind the Game”, co-conducido junto al exjugador y entrenador de la NBA Steve Nash, LeBron respondió a la inquietud de un fan sobre si consideraría entrenar un equipo de la NBA tras su retiro.
Nash, cuyo paso como entrenador de los Brooklyn Nets fue breve y complicado, le aconsejó: “Por favor, no entrenes.”
LeBron coincidió de inmediato, riendo y respondiendo: “De ninguna manera, de ninguna manera, chicos. No va a pasar. Ningún equipo. Cero posibilidades.”
Esta contundente negativa de LeBron a una carrera en la dirección técnica es destacable, dado su reputación como uno de los jugadores con mayor inteligencia táctica y su frecuente rol como líder en la cancha. Fans y analistas a menudo lo apodan “LeCoach” o “LeGM” por su influencia en la estrategia y decisiones de plantilla, lo que alimenta la especulación de que algún día podría dirigir desde el banquillo.
Sin embargo, la respuesta de LeBron no deja lugar a dudas: entrenar no está en sus planes tras dejar de jugar.
Mirando más allá del banquillo: ¿qué sigue para LeBron?
La postura definitiva de LeBron lo pone en la misma línea de otras leyendas como Michael Jordan, quien también decidió no dedicarse a entrenar tras su retiro, prefiriendo enfocarse en la propiedad de equipos y en oportunidades mediáticas. James ya ha mostrado interés en la propiedad deportiva a través de su participación en Fenway Sports Group y ha insinuado posibles proyectos en entretenimiento y medios después del baloncesto.
Aunque no ha descartado otros roles dentro del ecosistema de la NBA —como ser propietario, involucrarse en la oficina principal o trabajar en medios—, entrenar está totalmente fuera de consideración. Mientras LeBron evalúa su futuro inmediato, que incluye una opción de jugador por 52.6 millones de dólares con los Lakers, sus planes a largo plazo seguirán siendo objeto de atención.
Pero para quienes esperan verlo dirigiendo desde la banca con una tabla táctica en mano, el mensaje de LeBron es claro: “Eso no va a pasar.”
Por ahora, el mundo del baloncesto solo puede especular sobre cómo será el próximo capítulo de LeBron, pero una cosa es segura: no incluirá entrenar a un equipo de la NBA.