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Gerard Piqué fue expulsado ayer en la Supercopa de Europa por, supuestamente, insultar al linier durante el partido. El central catalán se marchó antes de tiempo al vestuario y ahora podría caerle entre cuatro y doce encuentros. Con todo, el Barcelona ya ha anunciado que han recurrido la tarjeta roja y el propio futbolista se muestra arrepentido.

A través de las redes sociales, el zaguero ha querido pedir disculpas por su forma de tratar aquella situación. Asume su error, aunque al mismo tiempo trata de justificarse por medio de la "gran tensión" que había en el partido. "Quiero pedir disculpas porque la actitud con la que protesté al linier no fue correcta", reza el texto.

Además, Piqué quiso dejar claro que en ningún momento se dirigió al linier con las palabras que Velasco Carballo reflejó en el acta arbitral. "Sin embargo, en ningún momento empleé ningún tipo de insulto hacia su persona", confesó. Con estas disculpas, la sanción seguramente se vea reducida aunque lo más probable es que tenga que estar algún partido en el dique seco.