Antony guía al Betis rumbo a la gloria europea
El sueño verdiblanco ya es una realidad. El Real Betis logró una hazaña memorable tras superar una durísima eliminatoria ante la Fiorentina y clasificarse por primera vez en su historia a una final europea. En un duelo cargado de emociones, el conjunto dirigido por Manuel Pellegrini se impuso en la prórroga con marcador global de 4-3, gracias al tanto decisivo de Ez Abde, que desató la locura entre los aficionados béticos.
El equipo andaluz selló su boleto para la gran final de la Conference League, donde se medirá al Chelsea, que también selló su pase tras vencer al Breslavia. La cita será el próximo 21 de mayo en el Estadio San Mamés, en Bilbao, donde el club sevillano buscará escribir una página dorada en su historia.
Antony guía al Betis rumbo a la gloria europea
Si hay un nombre propio que marcó la semifinal fue el de Antony. El brasileño, con su talento y determinación, fue clave para que el Betis mantuviera viva la ilusión de alcanzar la final. Con un golazo de tiro libre que dejó sin opciones a David De Gea, Antony mostró el camino en el primer tiempo y confirmó por qué es una de las piezas más desequilibrantes del equipo.
Pero la 'Fiore' no bajó los brazos. Dos goles de Robin Gosens, ambos de cabeza en acciones a balón parado, devolvieron la paridad en el marcador global y llenaron de incertidumbre el ambiente justo antes del descanso. El Betis, que había empezado con fuerza y determinación, sufrió para contener los embates del conjunto italiano, acostumbrado a este tipo de instancias.
En la segunda mitad, Ez Abde ingresó para cambiar el ritmo del partido y fue creciendo con el paso de los minutos. El equipo de Pellegrini resistió como pudo ante las constantes amenazas aéreas de la 'Fiore', y cuando el encuentro parecía destinado a los penales, apareció el momento clave.
Una pérdida de balón de Richardson fue aprovechada por Isco, quien filtró un pase milimétrico para Antony. El brasileño se plantó ante De Gea, que detuvo el disparo inicial, pero el rechace quedó en pies de Abde, que no perdonó y empujó el balón al fondo de la red en el minuto 97.
El Betis aún tuvo otra ocasión clara, nuevamente con Abde, que estrelló un balón en el poste al 120’. Pero ya nada cambiaría el destino de este equipo. El silbatazo final confirmó la gesta: el Real Betis jugará su primera final europea, con la firme intención de coronarse en Bilbao ante uno de los gigantes del continente.