Becker ve su reflejo en Lamine Yamal

Boris Becker, el tenista más joven en ganar Wimbledon, confesó que Lamine Yamal le recuerda a sí mismo en sus días de gloria. Yamal, quien debutó con Barcelona a los 15 años y a los 18 ya es campeón de Europa, ha roto récords y se perfila como uno de los favoritos a ganar el Balón de Oro en el futuro. Becker celebró su talento, pero advirtió que un ascenso tan meteórico puede traer consigo enormes desafíos.

La advertencia de un campeón

En entrevista con TalkSport, Becker encendió las alarmas: “Lamine lo está ganando todo, es el mejor jugador joven del mundo, pero me recuerda a mí a los 17 años. Tiene que elegir bien a sus amigos, confiar en su familia y crear una red de apoyo para no cometer errores obvios”. El alemán recordó cómo, tras su histórico Wimbledon, perdió privacidad y fue blanco de presión mediática.

La presión de ser una estrella juvenil

Yamal no solo ha levantado dos títulos de LaLiga y la Euro 2024, también fue el primer jugador en la historia en retener el Kopa Trophy y ha firmado temporadas de doble dígito en goles y asistencias. Sin embargo, Becker subrayó que estos logros pueden convertirse en una carga: “Cuando ganas tan joven, cada paso de tu vida es noticia”. Para el alemán, esta etapa es crítica para que Yamal encuentre balance entre su carrera y su vida personal.

El reto de construir su propio legado

El contexto actual parece darle a Yamal más herramientas que las que Becker tuvo en su tiempo. Barcelona lo arropa con compañeros de generación como Pedri y Gavi, y un club que cuida el desarrollo de sus jóvenes. La verdadera prueba será mantener la cabeza fría fuera de la cancha, evitar distracciones y seguir creciendo como líder. Si lo logra, Yamal no solo podría ser el jugador más dominante de su generación, sino el ejemplo de cómo convertir la fama temprana en una historia de éxito a largo plazo.