Un inicio complicado en el Bernabéu

La llegada de Kylian Mbappé al Real Madrid generó tanta expectación como polémica. Su primer curso en la capital española dejó cifras espectaculares: 31 goles en LaLiga y 42 en todas las competiciones, registros que lo convirtieron en pichichi y Bota de Oro en Europa. Sin embargo, esos números no escondieron las críticas.

Bajo las órdenes de Carlo Ancelotti, el delantero parecía no encajar en un equipo que venía de ganar Champions y Liga. Marcaba, pero no participaba en el juego colectivo. No presionaba, invadía espacios de Vinicius Jr. y, en muchos partidos, daba la sensación de que jugaba él contra todos. A pesar de sus goles, el Madrid cerró la temporada sin títulos, cayó en Champions y acabó segundo en Liga. Ese fracaso terminó por costarle el puesto a Ancelotti.

Xabi Alonso y un nuevo papel

La llegada de Xabi Alonso cambió por completo el panorama. Desde el primer día, el técnico convirtió a Mbappé en el eje de su proyecto, pero con una condición: debía adaptarse al sistema, sacrificarse y entender que su papel no sería siempre el mismo.

Alonso lo ha utilizado como delantero centro clásico, como segunda punta y hasta como generador de juego. “Kylian entiende muy bien el fútbol”, explicó el entrenador tras un partido en el que lo usó casi como mediapunta. Esa flexibilidad, combinada con la confianza mutua entre ambos, ha convertido al francés en un futbolista más completo, capaz de anotar y también de aportar al colectivo.

Números de Balón de Oro

El cambio se refleja en las estadísticas. Mbappé lleva 7 goles en 6 partidos, ha generado 18 ocasiones y lidera la liga en goles, tiros y goles esperados. Más sorprendente aún: ha recuperado 10 balones en el último tercio del campo, cifras que lo colocan en la élite también en labores defensivas.

Lejos de ser aquel delantero individualista, Mbappé se ha transformado en un jugador total. Su entendimiento con Alonso y su capacidad para adaptarse al plan lo colocan hoy como uno de los favoritos al Balón de Oro.

De problema a pieza clave

Lo que hace un año parecía una incógnita, hoy es certeza. Mbappé no es un obstáculo para el Madrid, sino su mayor activo. Bajo la dirección de Alonso, el francés ha dejado atrás la sombra del fracaso y se ha convertido en el futbolista indispensable de un equipo que sueña con volver a dominar Europa.