AFCON 2025: cuando el torneo se juega fuera de la cancha

La Africa Cup of Nations 2025 todavía no empieza oficialmente y ya está envuelta en una tormenta que va mucho más allá del balón. Convocatorias dobles, tensiones de poder, comentarios polémicos y decisiones extradeportivas han puesto el foco en una realidad que acompaña históricamente al torneo: en la AFCON, lo político, lo identitario y lo simbólico pesan tanto como el talento.

Dos casos reflejan con claridad esta situación. Por un lado, el caos institucional en Camerún, una potencia africana atrapada en una guerra interna. Por otro, la sorprendente exclusión de Nicolas Pépé con Costa de Marfil, una decisión que abre el debate sobre hasta dónde llegan las consecuencias de lo que un jugador dice fuera de la cancha.

Toda la emoción de la AFCON 2025 se vive en exclusiva por beIN Sports, a partir del 21 de diciembre.

Camerún: dos listas, un conflicto y una selección dividida

Lo ocurrido en Camerún roza lo inédito incluso para los estándares africanos. A días del inicio del torneo, el país presentó dos listas distintas de convocados para la AFCON. Una fue emitida por la federación, liderada por Samuel Eto’o, y otra por el cuerpo técnico encabezado por Marc Brys, quien se niega a aceptar su destitución.

El conflicto es profundo. Eto’o y Brys mantienen una guerra abierta por el control del proyecto deportivo, al punto de dejar a jugadores, clubes y aficionados en total confusión. La federación anunció incluso a David Pagou como entrenador oficial del torneo, con nuevo staff incluido, mientras Brys sostiene que sigue siendo el técnico legítimo.

Las consecuencias deportivas son evidentes. Figuras como André Onana, Eric Choupo-Moting y Vincent Aboubakar fueron excluidas en la primera lista, generando sospechas y versiones internas. El caso de Aboubakar es especialmente sensible: se afirma que su ausencia responde al temor de que supere el récord goleador histórico de Eto’o.

Históricamente, Camerún ha sufrido cuando el desorden institucional se impone al fútbol, y esta AFCON no parece ser la excepción. Talento hay de sobra, pero la preparación y la claridad son claves en un torneo corto y despiadado.

Nicolas Pépé: cuando las palabras cuestan una convocatoria

En Costa de Marfil, la polémica toma otro camino. Nicolas Pépé, uno de los nombres más reconocidos del plantel, quedó fuera de la lista para la AFCON 2025 por razones extradeportivas, según confirmó el propio técnico Emerse Fae.

La decisión sorprende desde lo futbolístico. Pépé ha tenido regularidad con Villarreal, aportando goles y asistencias en LaLiga, y fue parte importante del camino mundialista de los Elephants. Sin embargo, sus comentarios fuera de la cancha pesaron más que su rendimiento.

El atacante generó controversia tras bromear sobre temas sensibles como la identidad nacional y lanzar comentarios irónicos sobre selecciones rivales y países anfitriones. Lo que pudo parecer una broma, fue interpretado internamente como una falta de responsabilidad y representación.

Fae fue claro: si solo contara lo deportivo, Pépé estaría en la lista. Pero en la AFCON, el contexto, la imagen y el mensaje importan tanto como el talento.

AFCON: identidad, poder y un torneo más grande que nunca

Estos dos casos confirman una verdad incómoda pero real: la AFCON no es solo fútbol. Es identidad, política, orgullo nacional y percepción pública. Un comentario mal medido o una lucha de poder mal gestionada puede tener consecuencias inmediatas en el rendimiento deportivo.

Y aun así, pese al caos, la polémica y las tensiones, este torneo se siente diferente. Más grande, más observado y más relevante que nunca. La AFCON 2025 promete emociones dentro del campo, pero también historias intensas fuera de él, donde cada decisión pesa y cada palabra cuenta.

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