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El Washington Post avanza en su edición que los organizadores de la International Champions Cup, el trofeo veraniego de más prestigio al reunir a los grandes clubes de Europa, han ideado un Clásico en Estados Unidos.
La idea de Relevent Sport Group, la empresa organizadora que preside Stephen Ross, es que el Allegiant Stadium de los Oakland Riders albergue el encuentro entre Real Madrid y Barcelona.
Otra de las opciones que se maneja es que fuera el SoFi Stadium de Los Ángeles en el caso de que fallase el primero.
La última vez que se vieron las caras Real Madrid y Barcelona en Estados Unidos fue en 2017 en el último partido de Neymar con la camiseta azulgrana antes de marcharse al PSG.
Aquel día los azulgranas se impusieron al eterno rival 2-3 con goles de Piqué, Rakitic y Messi, mientras que la parte madridista Asensio y Kovavic fueron los autores.
