Histórico Jorginho: el triplete que nadie había logrado

La final de la Copa Libertadores no solo coronó al Flamengo como campeón continental. También marcó un hito sin precedentes en la carrera de Jorginho, quien este sábado se convirtió en el primer futbolista de la historia en levantar Champions, Eurocopa y Libertadores. Un logro que define a un jugador cuya trayectoria ha sido tan improbable como extraordinaria.

Nacido en Imbituba (Brasil), criado futbolísticamente en Italia y consagrado entre Europa y Sudamérica, Jorginho resume en su carrera tres continentes, tres estilos y tres títulos que ningún otro jugador ha podido combinar. Su recorrido comenzó muy lejos de los focos, llegando a Italia a los 15 años para debutar en el Hellas Verona en 2010. Aquel adolescente que soñaba con hacerse un hueco en la Serie A terminó alcanzando la cima absoluta del juego.

De Oporto a Wembley… y ahora a Sudamérica

La primera gran cumbre llegó el 29 de mayo de 2021, cuando conquistó la Champions League con el Chelsea frente al Manchester City de Pep Guardiola (0-1 en Oporto). Aquella temporada lo consolidó como uno de los mediocampistas más influyentes de Europa, pieza clave en el título continental y en la estructura del equipo londinense.

Solo unas semanas después, el 11 de julio de 2021, tocó el cielo de selecciones: Italia se proclamó campeona de la Eurocopa en Wembley tras vencer a Inglaterra en los penaltis. Jorginho, ya convertido en referente de la azzurra, coronaba así el año más exitoso de su carrera.

Su currículum europeo siguió creciendo con el Chelsea —Europa League, Supercopa de Europa y Mundial de Clubes— antes de firmar por el Arsenal. Pero en 2025 tomó una decisión inesperada: regresar a Brasil para jugar en el Flamengo.

La noche que lo llevó a la inmortalidad

Este sábado, el ‘Fla’ derrotó 0-1 a Palmeiras y Jorginho se alzó campeón de la Libertadores, completando el triplete más exclusivo que existe. Nadie antes había logrado unir en su palmarés los tres grandes títulos de clubes y selecciones de ambos continentes.

A sus 33 años, Jorginho ya no necesita pruebas para justificar su impacto. Lo suyo es historia pura: la de un jugador que salió de Santa Catarina, conquistó Europa y regresó a casa para entrar en un club al que solo él pertenece.

Un campeón en todos los idiomas del fútbol. Un futbolista irrepetible.